¡Hasta luego, con el corazón!

Antes que concluya el día, no puedo dejar de comentar el día de hoy. Ha sido tan intenso que apenas he tenido tiempo de escribiros nada. La misa de esta mañana fue entrañable y nos mostró que el Señor ha estado todo el tiempo con nosotros. De hecho en el día de Cristo Rey podemos decir, que ha sido todo un regalo para nosotros, los salesianos y los jóvenes participantes, estos días de convivencia. En la misa, hemos podido celebrar los 150 años del nacimiento de los Salesianos, de aquellos 17 jóvenes que se quedaron con Don Bosco para iniciar una aventura que dura hasta hoy. ¡qué grandeza pertenecer al grupo de los 17! Cada uno de los chicos ha tenido oportunidad de vivir en familiaridad, compañerismo, amistad...en tan poco tiempo hemos logrado crear un ambiente de ganas por descubrir y responder a la pregunta: "¿qué plan tiene Dios para mí?". Nosotros, los salesianos estaríamos contento con que al menos una de las respuestas, si Dios así lo quiere, fuera "me quedo con Don Bosco, para seguir anuniando el evangelio a los jóvenes" del polígono o de otros polígonos que están esperando. Tras la emotiva misa donde se repartió como signo un pin con el rostro de Don Bosco, nos marchamos a la Trinidad para concluir el encuetro, donde cada uno pudo escribir en silencio y personalmente las vivencias y su disponibilidad a seguir participando en otros encuentros YOCONTIGO